Custodia

Custodia

Saludo

Bendición

miércoles, 31 de enero de 2024

Sexta +

 San Juan Bosco, presbítero, memoria obligatoria


Nació junto a Castelnuovo, en la diócesis de Turín, el año 1815. Su niñez fue dura. Una vez ordenado sacerdote, empleó todas sus energías en la educación de los jóvenes e instituyó Congregaciones destinadas a enseñarles diversos oficios y formarlos en la vida cristiana. Escribió también algunos opúsculos en defensa de la religión. Murió el año 1888.

Hora Intermedia (Sexta)


Inicio


(se hace la señal de la cruz mientras se dice:)

V/. -Dios mío, ven en mi auxilio.
R/. -Señor, date prisa en socorrerme.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya

 
Himno


Te está cantando el martillo,
y rueda en tu honor la rueda.
Puede que la luz no pueda
librar del humo su brillo.
¡Qué sudoroso y sencillo
te pones a mediodía,
Dios de esta dura porfía
de estar sin pausa creando,
y verte necesitando
del hombre más cada día!

Quien diga que Dios ha muerto
que salga a la luz y vea
si el mundo es o no tarea
de un Dios que sigue despierto.
Ya no es su sitio el desierto
ni en la montaña se esconde;
decid, si preguntan dónde,
que Dios está -sin mortaja-
en donde un hombre trabaja
y un corazón le responde. Amén.

Salmodia


Salmo 122: El Señor, esperanza del pueblo


Ant: Tú que habitas en el cielo, ten misericordia de nosotros.

Dos ciegos... se pusieron a gritar: «¡Ten compasión de nosotros, Señor, Hijo de David!» (Mt 20,30)

A ti levanto mis ojos,
a ti que habitas en el cielo.

Como están los ojos de los esclavos
fijos en las manos de sus señores,
como están los ojos de la esclava
fijos en las manos de su señora,
así están nuestros ojos
en el Señor, Dios nuestro,
esperando su misericordia.

Misericordia, Señor, misericordia,
que estamos saciados de desprecios;
nuestra alma está saciada
del sarcasmo de los satisfechos,
del desprecio de los orgullosos.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.

Ant: Tú que habitas en el cielo, ten misericordia de nosotros.

Salmo 123: Nuestro auxilio es el nombre del Señor


Ant: Nuestro auxilio es el nombre del Señor.

Dijo el Señor a Pablo: «No temas..., que yo estoy contigo» (Hch 18,9.10)

Si el Señor no hubiera estado de nuestra parte
-que lo diga Israel-,
si el Señor no hubiera estado de nuestra parte,
cuando nos asaltaban los hombres,
nos habrían tragado vivos:
tanto ardía su ira contra nosotros.

Nos habrían arrollado las aguas,
llegándonos el torrente hasta el cuello;
nos habrían llegado hasta el cuello
las aguas espumantes.

Bendito el Señor, que no nos entregó
en presa a sus dientes;
hemos salvado la vida, como un pájaro
de la trampa del cazador:
la trampa se rompió, y escapamos.

Nuestro auxilio es el nombre del Señor,
que hizo el cielo y la tierra.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.

Ant: Nuestro auxilio es el nombre del Señor.

Salmo 124: El Señor vela por su pueblo


Ant: El Señor rodea a su pueblo ahora y por siempre.

Paz sobre el Israel de Dios (Ga 6,16)

Los que confían en el Señor son como el monte Sión:
no tiembla, está asentado para siempre.

Jerusalén está rodeada de montañas,
y el Señor rodea a su pueblo
ahora y por siempre.

No pesará el cetro de los malvados
sobre el lote de los justos,
no sea que los justos extiendan
su mano a la maldad.

Señor, concede bienes a los buenos,
a los sinceros de corazón;
y a los que se desvían por sendas tortuosas,
que los rechace el Señor con los malhechores.
¡Paz a Israel!

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.

Ant: El Señor rodea a su pueblo ahora y por siempre.

Lectura Bíblica


Lectura de la carta a los Colosenses
Col 3,17

Todo lo que de palabra o de obra realicéis, sea todo en nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él.

V/. Te ofreceré un sacrificio de alabanza.

R/. Invocando tu nombre, Señor.

Final

Oremos:

Dios todopoderoso y lleno de amor, que, a la mitad de nuestra jornada, concedes un descanso a nuestra fatiga, contempla complacido el trabajo que hoy hemos empezado, remedia nuestras deficiencias y haz que nuestras obras te sean agradables. Por Jesucristo nuestro Señor.

Amén.

(se hace la señal de la cruz mientras se dice:)


V/. Bendigamos al Señor.
R/. Demos gracias a Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario